El espíritu de la Calandria
Manuel Acosta Ojeda. Compositor
Nos conocimos en la década de 1960, por Rosa Elvira Figueroa Núñez, quien dirigía la Escuela de Música y Danzas Peruanas, donde Olga Espíritu Javier (nuestro personaje del día de hoy) formaba parte del elenco. Varios años después nos volvimos a encontrar en cuanto conversatorio sobre folclore se hiciera; siempre preocupada por el destino de la música de su Huañec adorado, buscando los caminos para que sigan danzando las Pastoras del Hanan Yauyos.
Nos conocimos en la década de 1960, por Rosa Elvira Figueroa Núñez, quien dirigía la Escuela de Música y Danzas Peruanas, donde Olga Espíritu Javier (nuestro personaje del día de hoy) formaba parte del elenco. Varios años después nos volvimos a encontrar en cuanto conversatorio sobre folclore se hiciera; siempre preocupada por el destino de la música de su Huañec adorado, buscando los caminos para que sigan danzando las Pastoras del Hanan Yauyos.
Hasta ese entonces desconocía que dentro de esa menuda figura se escondía una peculiar voz, con muchas posibilidades. Llegó a ser el orgullo de su región. Cada canción que ella interpretaba se convertía en éxito.
Reivindicación
Pero no solo danzaba y cantaba. Ella se graduó en la Escuela Autónoma de Bellas Artes, en la especialidad de dibujo y pintura. Así, Olga Espíritu Javier se convirtió en una maestra de Educación por el Arte, junto con muchos cultores de la canción nacional.
En Radio El Sol, Luis Pizarro Cerrón, por la década de 1950 tenía un programa titulado ‘Sol en los Andes’. Hasta allí llegó Olga. Luego de escucharla cantar, la bautizó como ‘La Calandria Peruana’.
Este espacio servía para denunciar la hostilización del andino y su música en la vieja Lima. Época de oro de los coliseos, centros creados por los provincianos para poder bailar y llorar al ritmo de su añoranza.
Los especialistas dicen que ‘La Calandria’ tenía registro de soprano, codeándose con lo mejor de ese tiempo. Ella utilizaba todo lo aprendido de la cultura occidental, para enmarcar los sonidos de su tierra.
Su talento la llevó a representarnos en diferentes países de Latinoamérica, con posibilidades de hacer carrera, pero ella regresaba una y otra vez, con más ganas de seguir trabajando.
La vida hizo que su entierro fuera el mismo día en que se celebra el Día Mundial del Folclore, el 22 de agosto, fecha en que sus familiares, amigos y alumnos la acompañaron hasta su última morada.
Yauyos querido
(Olga Espíritu Javier)
Yauyos eres la belleza de tu gran provincia
La riqueza de tus pueblos, la bondad de tus hijos
Todo, todo te embellece
Yauyos tierra hospitalaria
Grandes fiestas patronales celebran tus pueblos
Llegando a tres cruces se divisan tus paisajes
De San Joaquín, Cochas, Quinches, Huañec
Tierra generosa, mi tierra querida
Tanta, pueblito del ande, de bellos paisajes
Omas, tamara y pilas de lindas mujeres.
Dato
En 2009 el Instituto Nacional de Cultura le concedió la distinción de Personalidad Meritoria de la Cultura Peruana.
DIARIO EL PERUANO